Advertencia: seguir estos consejos permitirán que en tu próxima vida seas una ardilla y no un conejo (recuerden de dónde salen las patas “de la buena suerte”). ****
Etiquetas: hoy en día es un pilar fundamental para mantener organizado tu Gmail (algo así como la katana en Pulp Fiction y en Kill Bill). Aconsejo clasificar no según remitente específico, sino que crear etiquetas que engloben más e-mails que los dedos de una mano (Trabajo/Cuentas/Viajes/Universidad/Familia).
- Sub-etiquetas: supongamos que tenemos una etiqueta con Cuentas, lo que hacemos es crear sub-etiquetas para la cuenta de Teléfono, Internet, tarjetas de crédito, etc.
- Colores: se permite la personalización de las etiquetas, así que aprovecha a usarlos de tal manera que contrasten entre ellos y se facilite el acceso a lo que quieres.
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Filtros: hay e-mails que te llegan que el filtro de Spam no los detecta, para eso puedes marcar varios correos y crear un filtro que los elimine apenas te lleguen a tu bandeja, y de esa forma limpiar en gran parte tu cuenta de correo. También en Gmail se pueden filtrar los mensajes para que automáticamente sean etiquetados, y de esa forma mantener de mejor modo todo este cuento.
Archivar: una vez que tengamos los correos etiquetados, archivarlos los enviará a la carpeta creada a base de las mismas etiquetas. Si quieres encontrar el e-mail que te mandó tu jefe, solo tienes que entrar a la carpeta correspondiente y no a la masa de cientos de correos que solemos tener en la bandeja.
Organizar lo que enviamos: es probable que organicemos lo que nos llega, pero lo que enviamos rara vez se clasifica, para lo cual también podemos crear filtros para que se organicen, porque a pesar de que Gmail ordena los correos como si fuesen conversaciones, a veces somos nosotros los que iniciamos las comunicaciones.
Eliminar: un arma de doble filo, contando con la enorme cantidad de espacio que nos entrega Google, pues puede ser que lo que ahora no nos parece importante, mañana lo sea. Se recomienda eliminar sólo aquello que realmente se considere que es basura, mas existen situaciones que un e-mail te pueden ayudar, ya sea plateando un reclamo contra alguna compañía telefónica, demandar a tus padres, o cosas por el estilo.
Los no-leídos primero: entra a las configuraciones y mete mano para que lo primero que veas en tu bandeja sea lo que no has leído.
Evita que te lleguen notificaciones: Facebook, Twitter, etc. suelen enviar muchas notificaciones sobre inicio de sesiones, juegos, grupos, publicaciones, etc. que muchas veces no sirven de nada y solo generan ruido, por lo cual es altamente recomendable editar las configuraciones correspondientes en cada servicio.
Diferenciar tus cuentas: si inicias más de una cuenta de Google, utilizar temas distintos ayudará a no enviarle a tu jefe tu informe desde [email protected], en vez de “[email protected]” (me ha pasado, hasta el día de hoy me apuntan con el dedo cuando voy por la calle).
Aprende: lee tutoriales, mira vídeos en Youtube, comparte en foros, etc. para saber cómo realizar estos y otras ideas para mejorar tu Gmail.
Si tienes algún otro consejo, colócalo en los comentarios y nuestros delfines entrenados analizarán si les sirvió o no!
Nota: si tienes un smartphone, te lo agradecerá a través de quedarse callado durante más tiempo, en especial si es Android.